Las fuerzas estadounidenses, en colaboración con los servicios de inteligencia y seguridad iraquíes, abatieron a un destacado dirigente del ISIS en un ataque aéreo en el oeste de Iraq, según funcionarios de ambos países.
Abdallah Makki Muslih al-Rifai, alias ‘Abu Khadijah’, era conocido como el “califa adjunto” del grupo militante y “uno de los terroristas más peligrosos de Iraq y del mundo”, dijo el primer ministro iraquí, Mohammed Shia al-Sudani, en un comunicado publicado en X.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, publicó en las redes sociales este viernes por la noche que “el líder fugitivo de ISIS en Iraq fue abatido. Fue perseguido sin descanso por nuestros intrépidos combatientes. Su miserable vida fue terminada, junto con otro miembro de ISIS, en coordinación con el Gobierno iraquí y el Gobierno Regional Kurdo. PAZ A TRAVÉS DE LA FUERZA”.
El “líder global del ISIS nº 2, jefe de Operaciones Globales y emir del Comité Delegado” fue abatido junto a otro integrante del ISIS en un ataque de precisión el jueves en la provincia iraquí de Al Anbar, informó el Mando Central estadounidense (CENTCOM, por sus siglas en inglés).
Las tropas estadounidenses e iraquíes hallaron muertos a los dos del ISIS en el lugar del ataque. Ambos “llevaban ‘chalecos suicidas’ sin explotar y portaban múltiples armas”, según el comunicado del CENTCOM.
Identificaron a Abu Khadijah “gracias a una coincidencia con el ADN recogido en una redada anterior en la que Abu Khadijah escapó por los pelos”, según el comunicado.
Como dirigente del ISIS en Iraq y Siria, Abu Khadijah era responsable “de las operaciones, la logística y la planificación llevadas a cabo por el ISIS en todo el mundo”, afirma el CENTCOM. También dirigió una parte significativa de las finanzas de la organización global del grupo.

En su declaración en X, el primer ministro de Iraq, Mohamed al-Sudani, dijo que “los iraquíes continúan sus impresionantes victorias sobre las fuerzas de la oscuridad y el terrorismo”.
Antes de una serie de derrotas a manos de una coalición liderada por Estados Unidos hace casi seis años, el ISIS –también conocido como el “califato”– dominaba gran parte de Siria y el norte de Iraq, al tiempo que engendraba afiliados en toda África y Asia.
Organizó una serie de mortíferos atentados terroristas en ciudades europeas y sigue activo como grupo terrorista en más de una docena de países, inspirando y apoyando a individuos y células en Europa y Rusia en los últimos años.
Aunque ahora se trate de una red poco estructurada y no de un califato autoproclamado que controla grandes ciudades, el ISIS dista mucho de estar moribundo.
El atentado más sonado reivindicado por el ISIS en 2024 fue el devastador ataque a un centro comercial de Moscú en marzo, que dejó al menos 150 muertos y más de 500 heridos.
A las autoridades estadounidenses les preocupa que la inestabilidad tras el colapso del férreo régimen de Bashar al-Assad, gobernante sirio de 2000 a 2024, pueda permitir al ISIS expandirse desde sus remotos bastiones del desierto, y también recuperar un punto de apoyo en Iraq.
El líder iraquí al-Sudani fue el primero en anunciar la muerte de los operativos, en una declaración que se produjo durante la primera visita del máximo diplomático sirio a Iraq desde la caída de al-Assad.
Los dos países se comprometieron a trabajar juntos para combatir el terrorismo, dijo la oficina de al-Sudani en un comunicado, añadiendo que el compromiso de Iraq con la seguridad y la estabilidad de Siria tendrá un “impacto directo en la estabilidad regional”.
Este reportaje fue actualizado con nueva información.
Katherine Dautrich, de CNN, contribuyó a este reportaje.